Anoche me senté frente a la TV y a eso de las 10 y media me encontré con el partido de la U y Audax... me pareció un buen rato para observar en la práctica todo lo que se ha comentado respecto al nuevo técnico azul y sus capacidades, que serían largamente sobradas para nuestro medio.
Lo que pude apreciar en la parte de cotejo que alcancé a disfrutar es un poco como el título que le puse a este comentario... y quizás por ello se me ocurre pronosticar que la U, a pesar de contar con tremendo técnico, podría sufrir bastantes dolores de cabeza este 2009.
Observé que lo charrúa del técnico le salió por los poros y se lo impregnó de inmediato al equipo azul. Mucho vértigo, mucha velocidad, muchas ganas, mucha búsqueda de potencia pero... falta de tranquilidad. Y ojo, este era un amistoso preparatorio mas, como cualquier otro... ¿qué será de la U en los duelos “de verdad”?
Esa falta de tranquilidad, que quedó de manifiesto en la seguidilla de oportunidades que carecieron de puntada final y el vendaval de pases imprecisos o derechamente al contrario que se vieron por momentos, hicieron imposible que los azules fueran capaces de soslayar la escuálida ventaja itálica y claro, en partidos donde se jueguen puntos y algo más, donde se necesita de nervios de acero por cantidad, creo que podría pasarle mucho más la cuenta al equipo azul.
En el fondo, el estilo charrúa, quizás, le venga bien a jugadores muy bien dotados futbolísticamente, para poder funcionar en base a velocidad y sin tener que pensar unos cuantos “largos” segundos la jugada, como es el estilo imperante de nuestro fútbol. En efecto, somos lentos en el tránsito de la pelota, pero no porque se quiera ser así, sino que mas bien, creo, porque no se cuenta con los dones suficientemente formados como para hacer la jugada veloz, “de primera”.
Entonces, sumando velocidad, potencia, ritmo, vértigo y carencia de habilidades de precisión en velocidad el resultado es... nervios completos e imprecisión constante.
En el fondo, creo, es bueno ser un profesional exacto, como el nuevo técnico azul... el problema es que a ello hay que agregarle... estar en el lugar exacto... en el momento exacto. En esto, florecen mis dudas respecto del devenir azul para el 2009.
Lo que pude apreciar en la parte de cotejo que alcancé a disfrutar es un poco como el título que le puse a este comentario... y quizás por ello se me ocurre pronosticar que la U, a pesar de contar con tremendo técnico, podría sufrir bastantes dolores de cabeza este 2009.
Observé que lo charrúa del técnico le salió por los poros y se lo impregnó de inmediato al equipo azul. Mucho vértigo, mucha velocidad, muchas ganas, mucha búsqueda de potencia pero... falta de tranquilidad. Y ojo, este era un amistoso preparatorio mas, como cualquier otro... ¿qué será de la U en los duelos “de verdad”?
Esa falta de tranquilidad, que quedó de manifiesto en la seguidilla de oportunidades que carecieron de puntada final y el vendaval de pases imprecisos o derechamente al contrario que se vieron por momentos, hicieron imposible que los azules fueran capaces de soslayar la escuálida ventaja itálica y claro, en partidos donde se jueguen puntos y algo más, donde se necesita de nervios de acero por cantidad, creo que podría pasarle mucho más la cuenta al equipo azul.
En el fondo, el estilo charrúa, quizás, le venga bien a jugadores muy bien dotados futbolísticamente, para poder funcionar en base a velocidad y sin tener que pensar unos cuantos “largos” segundos la jugada, como es el estilo imperante de nuestro fútbol. En efecto, somos lentos en el tránsito de la pelota, pero no porque se quiera ser así, sino que mas bien, creo, porque no se cuenta con los dones suficientemente formados como para hacer la jugada veloz, “de primera”.
Entonces, sumando velocidad, potencia, ritmo, vértigo y carencia de habilidades de precisión en velocidad el resultado es... nervios completos e imprecisión constante.
En el fondo, creo, es bueno ser un profesional exacto, como el nuevo técnico azul... el problema es que a ello hay que agregarle... estar en el lugar exacto... en el momento exacto. En esto, florecen mis dudas respecto del devenir azul para el 2009.
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